JaimeG & Co.

Nunca dejará de maravillarme la inagotable inventiva de los políticos, que con sus divertidas ocurrencias condimentan las insulsas vidas de los sufridos contribuyentes... Hace unos pocos días, la ministra de cultura de Hungría, María Schneider, propuso imponer un recargo del 0.8% sobre el precio de venta a las corbatas. Sí, han leído bien, pero no se pierdan las razones. Tras una sesuda y tortuosa reflexión, Schneider concluyó que las corbatas son obra de diseñadores, que son artistas, luego sus diseños son obras de arte. El arte es signo de cultura y por lo tanto, el Ministerio de Cultura debería tomar parte en el negocio. Este impuesto, de aprobarse, se haría extensivo también a los moños.
Si quieren una reseña periodística sobre esta increíble noticia, aquí les dejo el link al artículo que le dedica el diario Madrid Digital.