sábado, 26 de enero de 2008

El país de los ignorantes

Inauguramos una nueva sección de opinión donde se debatirán temas actuales que giren en torno a la ciencia en general y la Física en particular. Esta semana abrimos la sección con el "editorial":

Ayer, un colaborador me envió por correo un reciente artículo de Arturo Pérez-Reverte en el que en términos durísimos, acusa de todos los males educativos de nuestra intelectualmente putrefacta patria a la incompetencia en general tanto de los socialistas como de los populares. Yo, sin embargo, no pienso que la culpa sea exclusivamente de su imbecilidad congénita y su torpeza en materia de políticas educativas sino que culpo directamente a los cuarenta y pico millones de catetos que habitamos en este país.

La educación es tan sólo un aspecto de la madurez intelectual de una nación. Por muy bien planificado que estuviese un hipotético sistema educativo en España, si los índices de audiencia de Gran Hermano, de Cuarto Milenio o de cualquier programa que den en Antena 3 -salvo los Simpson- siguen siendo tan altos, nunca pasaremos de ser un pueblo de paletos supersticiosos y vulgares. Y el problema es que la cultura, la ciencia, el conocimiento en general ya no valen nada para la sociedad absurda en la que estamos inmersos. Mientras los cerebros emigran de las universidades españolas en busca de un mendrugo de pan que echarse a la boca, el sentir general de la población es que dedicar dinero al trabajo de los jóvenes investigadores de este país es un derroche. De hecho, el sentir de la población es que la investigación no es si quiera una ocupación. Las carreras universitarias (a saber: Física, Matemáticas, Biología, Medicina, Química, Ingenierías varias y similares y también Humanidades, pero me refiero a Filosofía, Historia y esas cosas, no a las demás chorradas que se suelen incluir bajo este título) se van quedando desiertas y lo que es peor, los licenciados en estas materias van perdiendo su prestigio en la sociedad en detrimento de otro tipo de "enseñanzas universitarias" en auge hoy en día. El sueño de todo joven e idealista español con toda la vida por delante es aspirar a un puesto administrativo bien remunerado alienante y rutinario, pero eso sí, con derecho a una plaza fija. Creo que esto va en contra de la definición de juventud.

A la gente no le interesa el conocimiento, les preocupan otras cosas. Les interesa el deporte y los miles de millones de euros que mueve; los debates políticos sobre la necesidad de la existencia del concepto de nación y sus ramificaciones filosóficas, morales y teológicas; a quién se cepilla fulanita de tal a espaldas de su marido y de su amante; quién organiza la gala de elección de la reina del Carnaval y saber qué echan esta noche en la tele. Mientras no les preocupe la cultura, seguirán permitiendo que cualquier soplapollas sin preparación sea profesor y se ocupe de educar a sus hijos. En los países civilizados (Escandinavia y sus alrededores), el puesto de profesor es de un enorme prestigio (y el mejor remunerado). Los científicos e investigadores tienen un elevado estatus social, se les alienta, se les da dinero para que investiguen se les premia. A la gente civilizada le preocupa el conocimiento. A nosotros, lamentablemente no.

1 comentario:

Anónimo dijo...

WOW! casi tan rabioso como el mismísimo Reverte!! jeje me gusta tu forma de pensar aunque, creo que no estoy de acuerdo en algo que afirmas del periodista: dices que no achaca la culpa a los españoles... ¿No queda claro que NO es así con la exquisita frase ..."haceis de este PAIS DE MIERDA aún más MIERDA"...? jajaj creo que con ella se mete hasta en el último rincón de la pudredumbre... lo que pasa es que está ENFRASCADO con los políticos porque es lo que tocaba SUPONGO jej

---> ¡¡¡ARRIBA LA CULTURA!!!